Natillas de chocolate

Como no podía ser de otra manera, otra receta dulce. Por suerte para mi salud física no hago muy a menudo, solo cuando tenemos invitados en casa o somos nosotros los invitados. Como este caso: preparé este postre porque teníamos invitados en casa, una receta de la revista Wholekitchen. Desafortunadamente uno de nuestros amigos se puso malo y la cena se canceló, así que en lugar de comérnoslo todo nosotros, acabaron las natillas en la comida familiar que teníamos en casa de mis padres al día siguiente.

El añadirle las fresas fue una idea de último momento y quedó espectacular, aunque las natillas solas también estaban de muerte. Una receta muy fácil y con un sabor igualito a las que se compran en el súper.

¡Empezamos!

Ingredientes (para 6 vasitos de unos 150 ml cada uno)

200 ml nata

540 ml leche

50 g cacao valor

100 g azúcar

35 g maicena

8 g de azúcar vainillado

Elaboración

Lo primero de todo es sacar la leche y la nata de la nevera un rato antes para poder trabajar con ellas a temperatura ambiente, si es que las tuviéramos en la nevera.

Disolvemos la maicena en un poco de leche, y la añadimos junto al resto de los ingredientes en un cazo, y vamos mezclando lentamente y a fuego medio hasta que vaya espesando y adquiera una textura ligeramente densa. No es necesario que llegue a hervir. 

 Apartamos del fuego, servimos en los recipientes y dejamos enfriar a temperatura ambiente para luego poner los recipientes en la nevera y tenerlos allí un mínimo de tres horas. 

Tras verter las natillas en los boles, les puse a cada bol un trozo de film transparente, tocando la superficie de la natilla para evitar que se haga costra y permanezca la superficie húmeda. 

Serviremos las natillas tal cual, o acompañadas de nata montada, fresas, helado o cualquier cosa que se nos ocurra. Al chocolate todo le va bien.

¡Y a disfrutar!